Tesoros en el Cielo

No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón… (Mat: 6:19-21). 

Dónde está tu corazón… ¡Ese es tu tesoro! 

¿Qué es un tesoro? 

Es una concentración de riqueza inmovilizada… Y su finalidad es tener un depósito de valor económico para un momento especial… “Piedras preciosas, monedas, joyas, obras de arte, dinero, títulos valor, acciones, etc.

Tomemos como ejemplo el dinero: es verdad que en este mundo todo se mueve por medio del dinero; y que sin contar con él, de alguna manera muchas de las cosas que hoy tenemos habría sido imposible conseguirlas. 

Entendemos entonces que el dinero es necesario para desenvolvernos en la vida, pero no es lo más importante… Ahora, de ahí a empezar a atesorarlo, no es que no se pueda, ni que no se quiera, pero… ¡Muchos son los riesgos! “El orín corrompe, los ladrones lo pueden robar, la misma naturaleza puede acabar con él en un momento, etc” Por eso las palabras del Señor de NO hacerse tesoros en la tierra, no por el dinero y menos por el tesoro… Pero si, por el corazón, porque de él mana la vida (1Tim: 6:10).

Recordemos: Nuestra vida es Cristo, nuestra vida es él, y… NADA NI NADIE debe ocupar su lugar. ¿Dónde está tu corazón? ¿Quién o cuál es tu tesoro?… Para muchos, un tesoro puede ser un montón de chatarra o de cartón, pueden ser unos muebles viejos (antiguos), una camiseta del equipo favorito, la carta del ser amado que ya no está, nuestra pareja, etc… El valor o el concepto de tesoro, pueden variar dependiendo de cada persona, de la región donde viva y de la cultura que se tenga.

¿Qué es el cielo? 

Es conocido en latín como (Caeli), es un concepto de mas allá, presente en muchas religiones y filosofías espirituales. También es definido en religión como el lugar de la morada de los dioses, de los ángeles y de las almas humanas (terrenales). Quienes creen en él, afirman que el Cielo (o el infierno) es el destino final en el más allá, para muchos o todos los humanos…

Recordemos lo que el Señor Jesús dijo a sus discípulos:

I.- No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan…

La tierra es nuestro lugar de habitación, es el sitio de bendicion donde hemos venido a experimentar el Dios que es, a traves nuestro; pero aquí estamos de paso… Si nuestra confianza está en lo que se acaba y en lo temporal, es porque hemos cambiado el valor y el sentido de las cosas. “Todo lo terrenal es temporal, todo lo que se ve, se acabara…” (2Cor: 4:18).

• Las riquezas materiales no deben ser nuestra seguridad… Salomón escribió: No te afanes por hacerte rico; sé prudente, y desiste. ¿Has de poner tus ojos en las riquezas, siendo ningunas? porque se harán alas como alas de águila, y volarán al cielo (Prov: 23:4).

• Amontonar “Cualquier cosa” tampoco… Y confiar en el hombre menos… David escribió: “Ciertamente como una sombra es el hombre; ciertamente en vano se afana; amontona riquezas, y no sabe quién las recogerá… El Rey tenía claro el concepto de tesoro y dijo: Mi esperanza está en ti… (Sal: 39:6-7).

• Jeremías escribió: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta del Señor. Será como la retama en el desierto, y no verá cuando viene el bien, sino que morará en los sequedales en el desierto, en tierra despoblada y deshabitada (Jer: 17:5-6).

• El Rey Salomón, el hombre más rico de su tiempo, después de haber comprobado por el mismo, el hacer tesoros en la tierra dijo: “Vanidad de vanidades, todo es vanidad.” Y dejo por escrito cada una de sus experiencias al respecto.

 Di mi corazón a inquirir y a buscar con sabiduría sobre todo lo que se hace debajo del cielo, dediqué mi corazón a conocer la sabiduría, y también a entender las locuras y los desvaríos; dije a mi corazón: ven ahora, te probaré con alegría, y gozarás de bienes y de placer, propuse en mi corazón agasajar mi carne con vino, engrandecí mis obras, edifiqué para mí casas, planté para mí viñas; me hice huertos y jardines, y planté en ellos árboles de todo fruto. Me hice estanques de aguas, para regar de ellos el bosque donde crecían los árboles. Compré siervos y siervas, y tuve siervos nacidos en casa; también tuve posesión grande de vacas y de ovejas, más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén…

Me amontoné también plata y oro, y tesoros preciados de reyes y de provincias; me hice de cantores y cantoras, de los deleites de los hijos de los hombres, y de toda clase de instrumentos de música. Y fui engrandecido y aumentado más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén; a más de esto, conservé conmigo mi sabiduría.

No negué a mis ojos ninguna cosa que desearan, ni aparté mi corazón de placer alguno, porque mi corazón gozó de todo mi trabajo; y esta fue mi parte de toda mi faena. Miré yo luego todas las obras que habían hecho mis manos, y el trabajo que tomé para hacerlas; y he aquí, todo era vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del sol. Vanidad de vanidades, dijo el Predicador, todo es vanidad.

Y termino su discurso diciendo… Ahora, a más de esto, sé amonestado. No hay fin de hacer muchos libros; y el mucho estudio es fatiga de la carne. El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre (Ecle: 12:8,12-13). ¡Entendió cuál, y quien era su tesoro!

• Y Jesús dijo a sus discípulos en (Mat: 6: 1-21) lo que para ellos valdría más, que todos los tesoros materiales que humanamente pudieran conseguir:

a)        Guárdense de hacer su propia justicia delante de los hombres…

El hombre juzga y da valor a las cosas por vista, solo por lo que tiene delante. Ejemplo: el profeta Samuel cuando fue enviado por Dios a ungir por Rey a uno de los hijos de Isaí. Y aconteció que cuando ellos vinieron, él vio a Eliab, y dijo: De cierto delante de Jehová está su ungido. Y Jehová respondió a Samuel: “No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón” (1Sam: 16:6-7).

El apóstol Pablo dijo: “No teniendo nuestra propia justicia” (A fin de conocerle) esta palabra debe ser tomada y puesta en práctica…  TESORO EN EL CIELO (Fil: 3:9-10ª). Por esto, todo hombre debe ser pronto para oír, tardo para hablar y tardo para airarse; TESOROS EN EL CIELO. “porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios.” (Stgo: 1: 19-20).

b)       Cuando den limosna, no hagas tocar trompeta en las calles… “Que no sepa su mano izquierda lo que hace su derecha” La limosna era considerado el más pequeño de los mandatos que debía cumplir el pueblo de Israel delante de Dios, después de las primicias, del diezmo y de la ofrenda. “Dar limosna, es dar las sobras”

> En la biblia católica dice: Hijo mío, no prives al pobre de su sustento ni hagas languidecer los ojos del indigente. No hagas sufrir al que tiene hambre ni irrites al que está en la miseria. (Eclesiástico: 4: 1-2) Biblia versión DHH.

>  Y en (Prov: 3: 27-28) dice “No te niegues a hacer el bien a quien es debido, cuando tuvieres poder para hacerlo. No digas a tu prójimo: Anda, y vuelve, y mañana te daré, cuando tienes contigo qué darle.

>  Jesús les dijo: dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios (Luc 20:25).

>  (Hech: 20:35) En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir. TESOROS EN EL CIELO. (Luc: 6:38) Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir…

Para meditar por el Espíritu:

¿Cómo es tu ofrenda, tu dar, tu tesoro delante de Dios?

El profeta Malaquías escribió de parte de Dios una exhortación para el pueblo de Israel, que trayéndola a nuestros días, en nada difiere con el hombre de este tiempo; y no porque vayan a venir maldiciones, pues vivimos en el tiempo donde la bendicion YA FUE DADA; “Nosotros somos la misma bendicion de Dios YA manifestada” pero si, porque todavía tenemos el corazón o nuestro tesoro en la tierra… El profeta dijo en su tiempo:

  Dios es TODO, es lo más grande que tenemos; y en todo lugar se ofrece a al Señor ofrenda limpia, porque grande es Su nombre entre las naciones… Y el Señor reprendió al pueblo diciendo: Uds profanan mi nombre cuando dicen que el alimento que les doy es despreciable e inmundo; eso dicen Uds de la mesa de su Señor… Además han dicho: ¡Oh, qué fastidio es esto! y me desprecian trayendo lo hurtado, lo cojo, lo enfermo, y lo presentan como ofrenda. ¿Aceptaré yo eso de vuestra mano? es maldito el que engaña, el que teniendo machos en su rebaño, promete, y sacrifica al Señor lo dañado. Porque yo soy Gran Rey, dice Jehová de los ejércitos, y mi nombre es temible entre las naciones (Mal: 1:11-14) (Gal: 6: 7).

Pregúntate… ¿Qué es lo que le queda en poder al hombre después de haber recibido  el 100% su salario?

 Según la enseñanza tradicional, al hombre le queda el 90% en su poder, pues ha devuelto a Dios el 10% o sea (el diezmo según la ley)…  Pero la verdad de todo esto es que el 90% de su salario se le va en sus gastos y obligaciones personales, en el pago de sus deudas y demás; lo que quiere decir que al hombre lo único que le queda es lo que sembró en Dios (TESORO EN EL CIELO), sea mucho o sea poco y recibirá conforme haya sembrado o mucho más porque Dios es bueno…

Pablo exhortó a sus discípulos diciendo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosamente, generosamente también segará. Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre (2Cor: 9:6-8). 

Muchos todavía  están mirando para arriba, pensando en cómo se hacen los tesoros en el cielo… “El que al viento observa, no sembrará; y el que mira a las nubes, no segará (Ecle: 11:4).

c) Cuando oren, no sean como los hipócritas que piensan que por ser oídos, recibirán mayor recompensa… Y les indico como hacer los tesoros en el Cielo, diciéndoles:

•     Reconozcan al Señor por encima de todo… ¡Él es, el todo y en todos!
•     Que su voluntad, sea hecha en la tierra… ¡Ya TODO fue consumado!
•     Perdonen a sus hermanos sus ofensas… TODOS somos uno… ¡ Él !
•    Y Reconozcan su reino, su poder, y su gloria, por todos los siglos… ¡Temor de Dios!

Todas y cada una de estas recomendaciones que el Señor hizo a sus discípulos, serían las que se convertirían en ese valor o TESORO en los cielos, que nadie podría robar… Es ¡Un tesoro especial! cuando se pone por obra…

¿Cómo es un tesoro?

Naturalmente pensamos que es, ese cofre enterrado en la tierra, lleno de joyas, de piedras preciosas, de dinero por montones, etc. Pero lo que si podemos tomar en verdad, es que nosotros somos esa buena tierra donde fue puesto o enterrado el mejor tesoro… dios mismo “Su espíritu, Su palabra y Su mente” ¡el Reino de los cielos a nuestro favor! (Mat: 13:44).

Un tesoro es, “Como menos no lo imaginamos”… ¡Está en nuestras manos! ha sido puesto delante de nuestros ojos, ha estado desde siempre; entramos al mundo con él, está guardado en cuerpos de carne o (vasos de barro). El Señor dijo por medio del profeta “Entresaca lo precioso de lo vil” (conocimiento, gracia, poder, sabiduría, verdad, etc) y serás como mi boca… (Jer: 15:19b)” Recordemos: somos la vida misma de Dios, su imagen, Su gloria, su reflejo, su bendición, etc (Col: 3: 11b). Veamos solo el tesoro que tenemos delante, ¡veamos a Dios! en todas las cosas… (Rom: 1: 19-20) (Col: 3: 11b).

II.- Haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan…

Espiritualmente, el Cielo es la mente de Dios y el tesoro es su pensamiento, ese que va siendo alumbrado en cada de uno de nosotros, para que lo pongamos en práctica… Lo que creemos confesamos y lo que confesamos vivimos… (Hech: 10:4).

El Señor dijo: “porque yo apresuro mi palabra para ponerla por obra” “Como digas, lo que dices te será hecho” Ej: a Jeremías el Señor le permitió ver por un momento lo que debía suceder, hasta que su confesión fuera la correcta; y le pregunto diciendo: ¿Qué ves tú, Jeremías? Y dije: Veo una vara de almendro. (Jer: 1:11-12) Y me dijo Jehová: Bien has visto; porque yo apresuro mi palabra para ponerla por obra.

Si vemos una vara, “nuestra confesión debe llevarnos a la acción”… ¿Por qué no vemos un árbol y no una vara? ¿Por qué no vemos un bosque y no un árbol? ¿Por qué no vemos el mundo lleno de bosques y no tan solo un bosque? … ¡La palabra es el tesoro que nos fue dado para usar! Y ¡Dios se apresurará a cumplirla a nuestro favor! Ej: el centurión dijo… Señor, solamente dí la palabra, y mi criado sanará… ¡Y fue sano en aquella misma hora! (Mat: 8:8).  

¿Cuándo algo es un tesoro?

Cuando es valioso, digno de estimación y de mucho precio… Antes de lo material, en un sentido similar, suele decirse de las personas estimadas. Ejemplo: “Nos podemos referir a nuestra espos@ o hij@s como nuestro tesoro”

¿Para qué es un tesoro?

Para que su gloria se manifieste, para que su nombre sea engrandecido, para descubrirlo, para valorarlo… “y para hacer notorias las riquezas de su gloria, las mostró para con los vasos de misericordia que él preparó de antemano para gloria” (Rom: 9:23). 

III.- Donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón…

¿Cuál es tu tesoro? Esta es una pregunta que debemos hacernos siempre, pues su respuesta nos llevará a entender como estamos viviendo delante de Dios…

Son tus bienes materiales, tus estudios, tu apellido, tu sexo, tu empleo, tu cargo en la empresa, tu profesión, tus padres, tus hermano, tus hijos, tu talento, tu inteligencia, tus pensamientos o el pensamiento de Dios…? “El temor a Dios” debe ser nuestro tesoro.  Ejemplo:

En (2Cron: 19:5-9) dice que Josafat puso jueces en todas las ciudades fortificadas de Judá, y dijo a los jueces: Mirad lo que hacéis; porque no juzgáis en lugar de hombre, sino en lugar de Jehová, el cual está con vosotros cuando juzgáis. Sea, pues, con vosotros el temor de Jehová; mirad lo que hacéis, porque con Jehová nuestro Dios no hay injusticia, ni acepción de personas, ni admisión de cohecho. Y a los levitas y sacerdotes que puso para hacer justicia les mandó diciendo: Procederéis asimismo con temor de Jehová, con verdad, y con corazón íntegro. TESOROS EN EL CIELO “Someteos unos a otros en el temor de Dios” (Efe: 5:21).

En conclusión:

La sabiduría de Dios y su justicia superan toda capacidad humana; es más humilde, y ha sido puesta al alcance de todos… Esta sabiduría se adquiere en el temor del Señor. Así fue dicho desde antes… “Cuídate de no olvidarte del Señor tu Dios. Al Señor tu Dios temerás, y a él solo servirás… (Deut: 6:12-13). Ejemplo: (Job: 1:1) era perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal.

El piso, el principio, la base sólida de la sabiduría que fue puesta en nosotros, y es… EL TEMOR DE DIOS… Pero los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza (Prov: 1:7). El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia (Prov: 9:10) por eso, a la honra precede la humildad (Prov: 15:33).

Mientras estemos en este cuerpo natural… Este es nuestro mayor tesoro “el Temor a Dios”…  Y David dijo: buen entendimiento tienen todos los que lo practican… (Sal: 111:10). El conocimiento de Dios, la honra, la justicia, el perdón, el servicio, el amor, la confesión, la paz, la sabiduría, el reposo, etc” TESOROS EN EL CIELO…

Entremos pues en este TESORO del reposo de Dios en sabiduría y disfrutemos al máximo y con entendimiento de todo lo que fue puesto a nuestro favor… Pablo escribió: porque también a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron (Heb: 4: 1).

Recordemos entonces que “Donde este nuestro corazón, ese es nuestro tesoro”

Somos en Dios, el mejor tesoro… Su gloria, Su bendicion y su misma vida.

El Cuerpo es el Límite

“Por lo cual, entrando en el mundo dice:

Sacrificio y ofrenda no quisiste; más me preparaste cuerpo” (Heb: 10:5).

El escritor a los hebreos, refiriéndose al cuerpo Jesús y al ministerio que venía a cumplir entrando al mundo físico escribió, que Ni las ofrendas ni los sacrificios que el pueblo hacía por tradición, por mandamiento u ordenanza de la ley para agradar a Dios eran aceptos delante de él (Heb: 10: 8-10)(Isa 1: 11-20) “Aunque él mismo hubiera sido quien las había dado a traves de Moisés” (Éxo: 20: 1 - 24: 3) y también fue él, quien encerró al hombre en desobediencia para que NO pudiera cumplir con esas exigencias de la ley (Rom: 11: 32) por tal motivo le fue necesario entrar al mundo y en la cruz darle el rumbo desde antes planeado. "El Cordero fue inmolado desde el principio del mundo" “Si alguno tiene oído, oiga” (Apoc: 13: 8-9) (Juan: 1: 11).

Esta fue la razón de la expresión de Pablo al decir… ¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén (Rom: 11:33-36).

Entendamos… El cuerpo Jesús…

a)   No fue un cuerpo común y corriente, pues fué engendrado por el mismo poder del Altísimo… ¡El Espíritu Santo! Así lo dio a conocer en su tiempo (Luc: 1:35).

b)  Fue un cuerpo “Sin maldición, sin pecado, sin concupiscencia, en fin… Sin ningún mal en él” (Juan: 14:30) pero… “Limitado” Por ser en todo semejante a sus hermanos en todo (Heb: 2:17ª) (Heb: 4: 15).

¿Qué es el cuerpo? ¿Cómo funciona? y ¿Para que fue creado?

El Cuerpo:

Es la estructura física y material del ser humano. Se compone de cabeza, tronco y extremidades. El cuerpo es el vestido del espíritu, lo visible de la verdadera identidad… Pues es Dios “El que hace a sus ángeles espíritus” para meterlos en un cuerpo (Heb: 1:6-7). En el caso de Jesús, ese cuerpo visible al ojo humano, era la vestimenta de la Gloria de Dios (Juan: 1: 14) así muchos Judíos murmuraran diciendo: ¿No es éste Jesús, el hijo de José, cuyo padre y madre nosotros conocemos? (Juan: 6:42) (Luc: 4: 22).

¿Cómo funciona el cuerpo humano?

Está organizado en diferentes niveles jerarquizados así:

Está compuesto de aparatos; éstos los integran sistemas, que a su vez están compuestos por órganos conformados por tejidos, que están formados por células compuestas por moléculas. El cuerpo humano posee más de cincuenta billones de células. Éstas se agrupan en tejidos, los cuales se organizan en órganos, y éstos en ocho aparatos o sistemas: Así: Locomotor (muscular y óseo), respiratorio, digestivo, excretor, circulatorio, endocrino, nervioso y reproductor. De igual manera funcionó el cuerpo de (Jesús)…

Ahora, el cuerpo de Cristo También tenía “Muchos miembros” (Rom: 12:4-5), con diferentes funciones o ministerios. Respecto a esto, el apóstol Pablo escribió que para que ese cuerpo fuera edificado “Dios mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, hasta que todos llegaran a la unidad de la fe y del conocimiento; al varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo (Efe: 4: 11-13)…

Meditar por el Espíritu…

La Iglesia o cuerpo de Cristo, la llamada esposa… “Columna y baluarte de la verdad” (1Tim: 3:15) YA fué levantada a la misma Gloria de Dios. Jesús se entregó por ella, para santificarla, purificarla, exaltarla y glorificarla. ¡El mismo la levantó y se la presentó, limpia, sin, mancha, sin arruga y sin cosa semejante! Sin pecado… (Efe: 5: 25-27).

Cuando el Señor se manifestó en carne, lo hizo para cumplir ese propósito especial; y NUNCA desistió de Su propósito hasta conseguirlo, así esto implicara entregar hasta su propia vida; pues tenía poder para volverla a tomar… (Juan: 10:18).

Oración:

Señor Jesús… De la misma manera cuando en un tiempo sentado a la mesa con tus discípulos les compartías los alimentos y les abrías los ojos… Hoy Señor conforme a Tu palabra declaro que los ojos del entendimiento de muchos, son abiertos por el alimento espiritual que venimos recibiendo por Tu espíritu, quien nos guía a toda verdad (Juan: 16: 13ª).

¡Señor que te reconozcan solo a Ti en la palabra! que caminen en Ti y no vista; que te vean a Ti y no al hombre, ni a la institución, ni a la religión, ni a la denominación, ni al pastor, ni al estrato, ni a la profesión… (Porque en el cuerpo siempre existirán limitaciones)... ¡Que te vivan a Ti, por el conocimiento! y Señor, que Arda su corazón cuando entiendan tu palabra y se muevan compartiendo con muchos, lo que ha sido alumbrado en su corazón por Tu espíritu (Luc: 24: 30-45ª). 

¿Para que fue creado el cuerpo?

Hablando del hombre natural…

a)   fue creado para ser señor de todas las cosas (Gén: 1: 27-28)

b)  para hacer notorias las riquezas de su gloria (Rom: 9:23)

c)   para manifestar el fruto del Espíritu (Gál: 5:22-23)

d)  y el amor de Dios, ese que Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta y que NUNCA deja de ser (1Cor: 13:4-8ª).

Y en el caso del cuerpo de Jesús, fue creado para que en su muerte, brotara de su costado, Su esposa… “Para que vosotros también creáis…”

Meditar por el Espíritu…

En (Juan: 19:33-35) dice que cuando los soldados llegaron a Jesús, como le vieron “ya muerto”, no le quebraron las piernas. Pero uno de ellos le abrió el costado con una lanza, y al instante salió sangre y agua… ¿Por qué agua y sangre? ¿Qué significado tiene?

Agua = La palabra… Su palabra cumplida y

Sangre = Su vida manifestándose…

De la misma manera como el primer Adan fue llevado por Dios a caer en un “Sueño profundo” para sacar de su costado una costilla y de ella formar a “Eva” la que sería su mujer (Gén: 2: 21-23); así mismo sucedió con Jesús, cuando cayó en ese sueño profundo de la muerte, para que después de haber sido herido por la lanza del soldado romano, brotara de su costado “Agua y Sangre” (Tipología de la Esposa); que no es otra cosa más que Su misma vida.

¿Quién broto de su costado? … “Jesucristo mismo” (1Jn: 5:6), así fue escrito…“Los dos serán una sola carne” (Efe: 5:31) sin diferencia (Gál: 3:28b). Ahora entendemos porque dijo en (Juan: 14:3) “Y vendré y os tomaré A MI MISMO”… ¡Sin relación con el pecado! (Heb: 9: 28)…

Para cada uno de los tiempos (A-C y D-C) o los siglos, el (Malo y el venidero = Bueno) de los que habla la biblia, había una cabeza representativa… Antes de la cruz era Adán, y el postrer Adán (Jesús) abriría camino a Cristo quien es la segunda cabeza representativa. En él están reunidos TODOS los tiempos… Antes de la cruz (Jesús) y después de la cruz (Cristo) = ¡Jesucristo!

¿Qué significa ADAN?

A = Ácido

D = Deoxiribu

A = AMOR (El Eslabón perdido) = Jesucristo = EL AMOR

N = Nucleico

Significado de (A.D.N) = Acido deoxiribunucléico: La prueba de ADN es el más preciso método disponible para determinar la Paternidad y otras Relaciones familiares. Con la prueba de ADN, podemos decir con un 100% de certeza que un presunto padre no es el padre, y con más de 99.99% que él es el padre biológico.

Para que entendamos que clase de ADN tenemos los que vinimos después de la cruz… En (1Cor: 15: 45-48) dice que: “Nosotros vinimos cual el celestial, después de los dos Adanes” Somos la manifestación del amor de Dios y nada tenemos que ver con el primer Adán.  Como es Dios… ¡Así somos nosotros en este mundo! (1Jn: 4: 17b).

Volviendo al cuerpo Jesús… (Siendo Dios mismo) Se limitó a un cuerpo de carne, aprendió la obediencia… Se humillo hasta lo sumo, se hizo siervo, cumplió en ese cuerpo judío una ley establecida para los hombres los cuales venían viviendo desenfrenados en delitos y pecados, y por último se hizo maldición en un madero para salvar a su pueblo.

Es por esto que el apóstol Pablo escribió… “Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús” (Fil: 2:5-8). En este cuerpo natural TODO lo podemos (Fil: 13) tenemos de Dios Su poder, Su amor y Su dominio propio (2Tim: 1:7).

Y hablando del hombre y del cuerpo que tomaría el Señor en su manifestación de carne,  desde mucho antes el Rey David había dicho: “Le hiciste un poco menor que los ángeles, le coronaste de gloria y de honra; Todo lo sujetaste bajo sus pies” (Sal: 8:4-9) y lo recuerda el apóstol Pablo en (Heb: 2: 6-18) diciendo que “Convenía a aquel por cuya causa son todas las cosas, y por quien todas las cosas subsisten, que habiendo de llevar muchos hijos a la gloria, perfeccionase por aflicciones al autor de la salvación de ellos.” Jesús (Limitado en ese cuerpo de carne) experimentaría todo lo que humanamente se puede vivir.

En (Heb: 4: 15) dice que “Tomó cuerpo natural igual que sus hijos” para socorrer a la descendencia de Abraham no a los ángeles, (No a lo celestial sino a lo natural). Por lo cual debía ser semejante en todo a sus hermanos… (En ese cuerpo limitado) padeció siendo tentado, tuvo hambre, sueño, cansancio, lloró, comió alimentos naturales, etc.  

Todo lo sujetaste bajo sus pies dijo David, y nada dejó que no sea sujeto a él; pero todavía no vemos que todas las cosas le sean sujetas dijo el escritor a los hebreos, pues (El libro fue escrito entre los años 64 y 65 D.C) y el cumplimiento total de su palabra, “de que TODAS las cosa le fueran sujetas”, fue en el año 70 D.C con la destrucción del templo de Jerusalén el 25 de julio. Cumpliéndose así, que “El cielo y la tierra pasarían, pero sus palabras no pasarían” (Luc: 21:20-33) Todo quedó sujeto a él, todo quedo bajo sus pies, bajo su palabra…

¿Por qué el cuerpo es el límite?

I)   Porque Jesús siendo la misma Sabiduría de Dios manifestada en ese cuerpo natural, limitado y débil humanamente hablando, nada podía hacer para cambiar Su voluntad y nadie la podía entender y nadie lo podría conocer en su divinidad.

II)  Porque si la hubieran conocido, nunca lo habrían crucificado y Su propósito nunca se habría llevado a cabo (1Cor: 2:8) Ejemplo: ni los sacerdotes de la ley, ni los miembros del sanedrín, ni los hermanos, ni los discípulos conocieron al que habitaba en ese cuerpo Jesús…

a)   Ni Nicodemo: (Juan: 3: 1-12) Si os he dicho cosas terrenales, y no creéis, ¿cómo creeréis si os dijere las celestiales?

b)  Ni Felipe: (Juan: 14:8-9) Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta…

c)   Ni los discípulos: (Juan: 14: 18) No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros… Pedro solo lo dijo “Tu eres el Cristo” inspirado por Dios (Juan: 6:68) (Mat: 16:16).

III) Porque le era necesario perfeccionarse en ese cuerpo, en temor reverente y en obediencia  (Heb: 5:7-9).

1.- En temor reverente:

a) Por aflicciones

b) Por ruegos, súplicas y lágrimas… Ejemplo: Pablo (2Cor: 12: 9-10).

2.- En obediencia:

a)  Hasta la muerte

b) Y habiendo sido perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación…

En conclusión:

Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.

Haced todo sin murmuraciones y contiendas, para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de esta generación… En la que resplandecéis como luminares en el mundo; asidos de la palabra de vida… (Fil: 2: 5-8, 14-16a).

Somos la misma bendicion de Dios manifestada en un cuerpo de carne

Nuestros Anillos de Seguridad

¡Servidores de Dios para nuestro bien!

(1Cor: 4:1) (Efe: 1:13-14)

Significado de Anillo: Del verbo anillar: (conjugar) Anillo es: 1ª persona singular (yo) presente indicativo o 3ª persona singular (él/ella/usted) pretérito indicativo.

Es un adorno para lucir, para mostrar, para honrar, ejemplo: (Anillo Matrimonial) Muchos lo esconden para salir a  alguna fiesta sin entender que es nuestro anillo de seguridad, el instrumento de bendición, que tenemos para evitar muchos dolores de cabeza.

Seguridad es: f. Calidad de lo que es o está seguro, la certeza o garantía de que algo va a cumplirse o que ya se cumplió.

Con estos significados podríamos decir entonces que nuestros anillos de seguridad son personas, instrumentos, situaciones puestas a nuestro favor… “Adornos de gracia puestos por Dios para nuestra protección”

Introducción:

Antes de la cruz, el hombre por haber caído en pecado y muerte por la desobediencia de Adán, y después de haber estado durante toda su vida en esclavitud, oscuridad y apartado de la presencia de Dios, según (Rom: 5: 12 y 3: 23).

HOY después de la cruz el hombre está  guardado por Su palabra, la cual es el primer anillo de seguridad del que hablaremos mas adelante. Pues “El cielo y la tierra pasarán, pero Su palabra no pasará” (Mar: 13:31).  Esto quiere decir que NADA NI NADIE le podrá hacer perder lo que por el Señor Jesús YA le fue dado (2Ped: 1: 3).

Nosotros somos el anillo de seguridad que muchos están necesitando…

¡Tú eres el camino que la gente debe ver!

Por eso… “Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina” (1Tim: 4:16) no porque vayas a perder lo que el Señor ya dió, sino porque teniendo TODO vivas como si no lo tuvieras.

Recuerda: El espíritu del hombre fue levantado a la misma esencia de Dios (1Jn: 4: 17b). Vivamos entonces nuestro tiempo, nuestra posición y nuestra verdadera identidad.

Ahora que por Su espíritu entendemos que después de la cruz, la historia de la humanidad cambio “total y radicalmente” a favor del hombre; que el propósito establecido por Dios tuvo su cumplimiento en la cruz cuando Jesús exclamó “consumado es” (Jn: 19:30) (Jn: 1: 11), hoy debemos tener muy claro que “Muchos lo desconocen”

… Muchos hermanos que nunca han asistido  a ningún sitio para ser edificados en la palabra, otros que por llevar mucho tiempo en las diferentes congregaciones han sido edificados  en parte del conocimiento de Dios y su palabra; y otros que por costumbre asisten a la iglesia tradicional y no les parece lo que están leyendo ahora… Deben tener en cuenta que ¡NADA de lo que el Señor dijo e hizo por la humanidad cambiara!

Anuncia y Aclara las verdades de Dios… Porque somos embajadores, siervos, colaboradores, anillos de seguridad, instrumentos de bendicion para nuestros hermanos, por eso hablemos de él, como debemos hablar (Efe: 6:20)  Porque para Dios somos grato olor de Cristo; olor de vida para vida. Pues no somos como muchos, que medran falsificando la palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios, y delante de Dios, hablamos en Cristo (2Cor: 2:15-17).

Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres (Jn: 8:32).

Para el pueblo de Israel Pablo y Bernabé fueron los primeros anillos de seguridad, pero ellos no lo entendieron ni lo aceptaron; entonces ellos se volvieron a los gentiles (Hech: 13:46). Su propósito era, que entendieran que en Cristo TODOS estaban perfectos (Col: 1:28-29), y les dió claridad al respecto diciéndoles:

Que en esa cruz, el Señor quito el pecado de sus hijos (Heb: 9:26), los redimió (Gál: 3:10-13), los justificó (Rom: 8:30, 5: 1), los perfeccionó (Heb: 10:14), los purificó (Efe: 5:26), los santificó (Heb: 10:10, 2: 11), los salvó (Tito: 3: 4-5), los enriqueció (2Cor: 8:9), los sanó (Isa: 53:5) (Mat: 8:17), les dio vida eterna (1Jn: 5:11), destruyó al diablo (Heb: 2: 14), venció a los demonios (Col: 2: 15) y los encerró en prisiones de oscuridad (2Ped: 2:4), trajo libertad (Gál: 5:1), quito las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, de los dos pueblos creó un solo y nuevo hombre (Efe: 2: 15), edifico la iglesia que es su esposa, la levantó y la glorificó a fin de presentársela a él mismo, una iglesia que no tuviere mancha ni arruga ni cosa semejante (Efe: 5:25-27) … TODO FUE HECHO ¡consumado es!

Que una sola ofrenda fue necesaria para hacer perfectos para siempre a los santificados. Y lo mismo atestigua el Espíritu Santo diciendo:

“Después de aquellos días, el Señor” pondré mis leyes en su corazón, y sus mente las escribiré, añade: Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado (Heb: 10:14-18).

¿Por qué entonces cuando el Señor permite que alguna persona nos diga las cosas como son, no le creemos y nos disgustamos?... Porque todavía muchos vivimos en ley y no lo hemos aceptado… 

“Pues la ley produce ira; pero donde no hay ley, tampoco hay transgresión” (Rom 4:15-16) y porque seguimos mirando las cosas que se ven, nos movemos al ojo, viendo lo temporal, pero cuando aprendemos a ver con los ojos del Espíritu, entenderemos las cosas eternas (2Cor: 4:18)… Y aprenderemos a valorar todo lo que el Señor ha puesto a nuestro servicio… “Nuestros anillos de seguridad” 

¿Me he hecho, pues, vuestro enemigo, por deciros la verdad? (Gál: 4:16).

Así reza un dicho popular… “El que no sabe, es como el que no ve”  por esta razón muchos defienden sus razones sin saber ni entender a Dios en su soberanía y voluntad… (1Tim: 1:7).

Pablo dijo: pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo (2Cor: 11:3) por eso, “No se alabe el sabio en su sabiduría… (Jer: 9:23-24)  pues terminaremos comportándonos como niños, diciendo mal de lo que para unos fue bien.

Ejemplo: El empleado del restaurante que llevaba los desayunos a una de la torres del World Trade Center. 

El anillo de seguridad para él, fue el (Avión) salvó su vida; mientras que para otros fue el medio por el cual muchos murieron; o el empleado al que le habían regalado un par de zapatos nuevos los cuales lo pelaron y le sacaron ampollas, y tuvo que detenerse unas cuadras antes y comprar una curas, pues no podía caminar. El anillo de seguridad fueron esos zapatos y esas ampollas pues salvaron su vida al no poder llegar a su trabajo en una de las torres.

¡Siempre habrá algo más en Dios que debemos conocer! Y lo entenderemos cuando por el uso, nuestros sentidos espirituales sean ejercitados en el discernimiento del bien y del mal (Heb: 5:12-14). 

1.- En el Espíritu… (Su palabra, El conocimiento y Su espíritu)

a)                                     Su palabra: “La verdad”

Este es el primer anillo de seguridad del que hablaremos:

Su palabra es espíritu y es vida, así lo dijo el Señor Jesús desde el principio, pero hay algunos que no le creen (Jn: 6:63-64). Por eso, examinémonos y probémonos a nosotros mismos si de verdad le creemos o no; pues “Nada podemos contra la verdad, sino por la verdad (2Cor: 13: 5-8). Ejemplo: ¿Qué dice Su palabra?

Que como él es, así somos nosotros en este mundo…. ¿Lo crees? En esto se ha perfeccionado el amor en nosotros, para que tengamos confianza (1Jn: 4: 17b). Que nos Despojémonos de los pensamientos viejos y que nos renovemos en el espíritu de nuestra mente, y que vivámos el nuevo hombre que somos creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad y para que comprobemos cuál es la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta (Efe: 4:22-24) (Rom: 12:2) pues… En Cristo… ¡Estamos completos! (Col: 2:10). 

b)                                     El Conocimiento:

El profeta Oseas escribió respecto al pueblo de Dios, “Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento” (Ose: 4:6) e Isaías escribió: Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová... (Isa: 55:8-59) pero el apóstol Pablo dejó claro que nosotros tenemos la mente de Cristo (1Cor: 2:16b)... 

¿Lo creemos? ¡HOY sus pensamientos y sus caminos son los nuestros! Solo que por Su espíritu van siendo alumbrados en nuestra vida… ¡Para hacer lo que debemos hacer!

"Si alguno se imagina que sabe algo, aún no sabe nada como debe saberlo” (1Cor: 8: 1b-2), pues en parte conocemos, y en parte profetizamos… Mas cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará (1Cor: 13:9-10). “Conoceremos la verdad, y la verdad nos hará libres” (Jn: 8:32).

¡Cuántas situaciones difíciles nos habríamos podido evitar si de verdad viviéramos conforme al conocimiento dado por Su espíritu! Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, y levántate de los muertos, y te alumbrará Cristo (Efe: 5:14).

HOY después de la cruz podemos disfrutar lo que dice el apóstol Pablo en (Col: 3:11b) que en Cristo Jesús “YA NO HAY DIFERENCIA” sino que él es el todo, y en todos, que todos somos uno en Cristo Jesús en (Gál: 3:28) y que “En Cristo Jesús todos estamos completos…” (Col: 2:10).  

c)                                     Su espíritu:

Pablo recordó a Timoteo estas palabras diciendo:

Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio (2Tim: 1:7). Nosotros vinimos al mundo cual el celestial, Cristo; santos, perfectos y completos (1Cor: 15:48) Y así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, siendo muchos, son un solo cuerpo, así también Cristo. Somos él mismo, manifestándose en muchos cuerpos (1Cor: 12:12) (col: 3: 11b).

2.- En el cuerpo: (Los cinco sentidos naturales, Los Padres, Los hermanos, La familia, Los amigos, el empleador, el gobierno, La congregación, Etc).

Cuando hablamos entonces de nuestros anillos de seguridad, en este cuerpo natural nos referimos a la manifestación de Su cuidado y protección en todo lo que debemos vivir cuando cumplimos su propósito en este mundo.

a)                                     Los Cinco Sentidos Naturales y sus Miembros:

Son los sensores en el cuerpo que nos llevarán a hacer y a disfrutar lo que debemos… ¿De cuantas cosas hemos sido librados por tener despiertos nuestros sentidos naturales?

La Vista: (Ojos) La lámpara del cuerpo es el ojo; cuando tu ojo es bueno, también todo tu cuerpo está lleno de luz; pero cuando tu ojo es maligno, también tu cuerpo está en tinieblas. Mira pues, no suceda que la luz que en ti hay, sea tinieblas (Luc: 11:34-35) ¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? (Luc: 6:39).

La Audición: (Oído) Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen (Jn: 10:27) Bienaventurados vuestros ojos, porque ven; y vuestros oídos, porque oyen. “Muchos profetas y justos desearon ver lo que veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron” (Mat: 13:16-17). 

El Olfato: (Nariz) Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y “por medio de nosotros” manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento. Porque “para Dios somos grato olor de Cristo” ¡Olor de vida para vida! (2Cor: 2:14-16).

El Gusto: (Lengua) No te des prisa con tu boca, ni tu corazón se apresure a proferir palabra delante de Dios; porque Dios está en el cielo, y tú sobre la tierra; por tanto, sean pocas tus palabras. Cuando a Dios haces promesa, no tardes en cumplirla… (Ecle: 5:2.4-6).

“De toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta, porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado” (Mat: 12:35-37). Ej: Job dijo: Las cosas que mi alma no quería tocar, son ahora mi alimento (Job 6:5-7). ¿Cómo estas confesando? ¿Qué cosas has venido proclamando? ¡Lo que dices, recibes!

¿Quién es el hombre que desea vida, que desea muchos días para ver el bien? Guarda tu lengua del mal, y tus labios de hablar engaño (Sal: 34:11-13) “Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes” (Efe: 4:29).

El profeta Samuel escribió que “El Dios de todo saber es Jehová, y a él toca el pesar las acciones” (1Sam: 2:3). Recuerda… “Lo que digas te será hecho” (Mar: 11:23b).

El Tacto: (Cuerpo) Cuando no se tiene a Dios como el guía de la vida, se va a tientas, como en tinieblas y sin luz… Con Dios está la sabiduría y el poder; suyo es el consejo y la inteligencia. El quita el entendimiento a los jefes del pueblo de la tierra, y los hace vagar como por un yermo sin camino (Job: 12:13, 24-25).

b)                                     Los padres:

Fueron puestos por Dios para que nos ayudaran a dar los primeros pasos y nosotros estamos en el mundo para ayudarles a ellos a dar sus últimos pasos… “Somos una extensión de su sangre” “Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre” (Efe 6:1-3).

Si están vivos demos gracias a Dios por tenerlos con nosotros y si ya partieron de este mundo… Demos gracias a Dios por el tiempo que estuvieron con nosotros, por sus enseñanzas y principios y por haber sido el medio que el Señor uso, para que pudiéramos en este mundo disfrutar de esas obras que él preparó de antemano para nuestra bendición.

c)                                     Hermanos:

Como en todas las familias siempre encontraremos unos que serán ejemplo para muchos y otros de los que en muchas ocasiones no nos gustaría recibir ningún comentario... Ej: Leer la historia de la familia de Jacob (Gén: 37:2-47: 11) pues el Señor usara cualquier experiencia negativa para manifestar su gloria, pues caminamos en obras preparadas de antemano para nuestra bendicion… “Todas las cosas nos ayudan a bien” (Rom: 8: 28-29).

Nota: Cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, a su hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto… Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda (Mat: 5:22-24). 

d)                                     La familia:

Según la Constitución política en el capítulo 2, articulo 42: dice que “La familia es el núcleo fundamental de la sociedad, se constituye por vínculos naturales o jurídicos, por la  decisión libre de un hombre y una mujer de contraer matrimonio o por la voluntad responsable de conformarla”… Es la unidad básica de la sociedad humana; centro fundamental del desarrollo de la vida afectiva y moral del individuo.

Según unas palabra dichas por Jesús se compone de “Todo aquel que hace la voluntad” de Dios. ¿Quién es mi madre, y quiénes son mis hermanos? Y extendiendo su mano hacia sus discípulos, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos. Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ése es mi hermano, y hermana, y madre” (Mat: 12:46-50). ¿Tu estas caminando conforme a Su voluntad? ¿Estas obedeciendo? ¿Has estado atento a estos anillos de seguridad?

e)                                     Los amigos:

Unos los describen como “los que alcahuetean todo” pero el verdadero amigo es aquel que pasando por encima de todos nuestros errores, fallas, dificultades y debilidades, nos ayudan, nos reprenden, nos exhortan y nos dicen esas cosas que en muchas ocasiones no nos gustarán. Otros dicen que es el que está con nosotros en las buenas y en las malas…

El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; y amigo hay más unido que un hermano (Prov: 18:24). Jesus dijo: Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer (Jn: 15:15).   

f)                                     El empleador:

Es el medio usado por Dios para que Su provisión llegue a nuestra mesa, para que nuestra lacena sea llena y para que toda necesidad económica sea suplida…

Debemos obedecer a con respeto, con sencillez de corazón, como a Cristo; no sirviendo al ojo, como queriendo agradar al hombre, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la voluntad de Dios; sirviendo de buena voluntad, como al Señor y no a los hombres, sabiendo que el bien que cada uno hiciere, ése recibirá del Señor… (Efe: 6:5-8) (Col: 3:22-26).

Debemos estar sujetos a ellos con todo respeto; no solamente a los buenos y afables, sino también a los difíciles de soportar (1Ped: 2:18-20).

g)                                     El gobierno:

Todos de una u otra forma hemos participado, hemos puesto nuestro granito de arena para que los que se encuentran en estos momentos ocupando esos lugares de privilegio, en eminencia, nos estén gobernando… No profiramos ninguna palabra en su contra, pues fuimos nosotros mismos quienes lo permitimos a traves de un voto popular, haciendo uso de nuestro derecho constitucional…  ¡Dios quita y pone reyes! (Dan: 2:21)

Por eso… “Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas” Rom: 13:1-5). ¡Son servidores de Dios para nuestro bien! Leer (Tito: 3:1-2) (1Ped: 2:13-17). 

h)                                     La congregación:

Todos estamos pues para bendicion… “Como anillos de seguridad a favor de los hermanos”  somos esa grande nube de testigos, vestidos de carne; despojémonos de todo peso y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante (Heb: 12:1). 

Si alguno fuere sorprendido en alguna falta, restaurémosle con espíritu de mansedumbre, considerándonos a nosotros mismos, no sea que nosotros también seamos tentados. Sobrellevemos los unos las cargas de los otros… (Gál: 6:1-2) y Considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos… ¡En amor! (Heb: 10:24-25).

En conclusión:

Los anillos de seguridad son servidores de Dios para nuestro bien... Y se presentaran del modo que menos pensamos. En momentos difíciles, en dolores, enfermedades, en lluvia, en sol, en calor, en frio, en una mirada, un perro, un hueco, un mojado, un golpe, etc. 

¿De cuantas cosas nos hemos salvado cuando algo así se ha presentado en nuestra vida? ¡Y nos hemos quejado!

Siempre vamos a necesitar de ellos mientras estemos en el cuerpo; y solo lograremos entenderlo cuando nosotros mismos estemos experimentando esa bendicion… Ejemplo:

Pablo dijo: “Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.” Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte (2Cor: 12:9-10).

Así que, cada uno someta a prueba su propia obra, y entonces tendrá motivo de gloriarse sólo respecto de sí mismo, y no en otro; porque cada uno llevará su propia carga. (Gál: 6:3-5). No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos. Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe (Gál: 6:9-10) (Heb: 13:17-18).

Recordemos… “Somos grato olor de Cristo, Su vida y su misma bendicion”

Somos… ¡Olor de vida para vida!