-->

Administradores de Dios

Introducción:

(1 Cor: 4:2) Se requieres de los administradores que sean hallados fieles.

La fidelidad es sinónimo de carácter, Consagración, Integridad y de firmeza.

Si hay alguien que conoce lo que somos… Es Dios mismo, El lo sabe todo, El nos creo, nos predestino, nos preparo y nos diseño para una experiencia especial en este mundo. “Desarrollar un Ministerio Celestial de fe y para fe.”

Nos hizo ministros competentes.

(2Cor: 3:4-6) Y tal confianza tenemos mediante Cristo para con Dios; no que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios, el cual asimismo nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica.

Objetivo:

(2Tes:1:12) Para que el nombre de nuestro Señor Jesucristo sea glorificado en vosotros, y vosotros en él, por la gracia de nuestro Dios y del Señor Jesucristo.

(Efe: 1:6) Para alabanza de la gloria de su gracia.

¿Como puede vivirse a la altura en la que Dios nos coloco?

(Col 3:16) Que su Palabra more en abundancia en nosostros...

(Sal:119:9) Guardando su Palabra... Limpiaremos nuestra vida.

Reflexionemos:

Es tanta su fidelidad para con nosotros que:

El mismo produce en nosotros el querer como el hacer. (Fil:2:13).

El mismo lo hace a través nuestro. (1 Tes:5:24).

El mismo nos afirma y nos guarda del mal. (2 Tes:3:3).

El mismo nos perfecciona, Afirma, Fortalece y Establece. (1 Ped:5:10).

Antes que administradores, somos hijos!

(Mal:1:6) El hijo honra al padre, y el siervo a su señor. Si, pues, soy yo padre, ¿dónde está mi honra? Y si soy señor, ¿dónde está mi temor?

Todo en Dios tiene su recompensa!

(Mal: 1:10) ¿Quién también hay de vosotros que cierre las puertas o alumbre mi altar de balde?

(Col: 3:23-24) Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres;

Sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.

(Mal: 2:16) Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales.

(Mal: 3:3) Y se sentará para afinar y limpiar la plata; porque limpiará a los hijos de Leví, los afinará como a oro y como a plata, y traerán a Jehová ofrenda en justicia.

(Mal: 3:18) Y serán para mí especial tesoro, ha dicho Jehová de los ejércitos,

(Mal: 4:2) Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada.

Por El, camionamos en Justicia (Rom: 5:1).

(1Co 1:30-31) Mas por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención;

para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor.

Dios es Fiel… Y se espera que los administradores sean hallados FIELES.

(2Cor: 6:4-10) antes bien, nos recomendamos en todo como ministros de Dios, en mucha paciencia, en tribulaciones, en necesidades, en angustias;

en azotes, en cárceles, en tumultos, en trabajos, en desvelos, en ayunos;

en pureza, en ciencia, en longanimidad, en bondad, en el Espíritu Santo, en amor sincero,

en palabra de verdad, en poder de Dios, con armas de justicia a diestra y a siniestra;

por honra y por deshonra, por mala fama y por buena fama; como engañadores, pero veraces;

como desconocidos, pero bien conocidos; como moribundos, mas he aquí vivimos; como castigados, mas no muertos;

como entristecidos, mas siempre gozosos; como pobres, mas enriqueciendo a muchos; como no teniendo nada, mas poseyéndolo todo.

Bendecid@s con toda bendicion.

0 comentarios:

Nota:

Puedes depositar tu ofrenda en cualquiera de las oficinas de Western Unión a nivel nacional, a nombre de William Daniel Muñoz Molano, con CC # 16680415, en Cualquier corresponsal bancario al número de celular 3157786249 por NEKI o haciendo transferencia directamente desde cualquier cuenta bancaria.

El apóstol Pablo escribió en (2Cor: 9:1-15) “Cuanto a la ministración para los santos, es por demás que yo os escriba”; pues conozco vuestra buena voluntad y generosidad, y no como de exigencia nuestra. Pero esto digo:

1) El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosamente, generosamente también segará.

2) Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra;

3) Y el que da semilla al que siembra, y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos de vuestra justicia, para que estéis enriquecidos en todo para toda liberalidad, la cual produce por medio de nosotros acción de gracias a Dios.

Porque la ministración de este servicio no solamente suple lo que a los santos falta, sino que también abunda en muchas acciones de gracias a Dios; pues por la experiencia de esta ministración glorifican a Dios por la obediencia que profesáis al evangelio de Cristo, y por la liberalidad de vuestra contribución para ellos y para todos; asimismo en la oración de ellos por vosotros, a quienes aman a causa de la superabundante gracia de Dios en vosotros.

¡Gracias a Dios por su don inefable!