¡Desechando la palabra de Dios!

(Hech: 13:46) 

Entonces Pablo y Bernabé, hablando con denuedo, dijeron: A vosotros a la verdad era necesario que se os hablase primero la palabra de Dios; mas puesto que la desecháis, y no os juzgáis dignos de la vida eterna, he aquí, nos volvemos a los gentiles…

Desechar: Es rechazar algo que no gusta o que se considera innecesario o inútil… Es “ Ahuyentar - arrumar - descartar - repudiar - tirar”

Con respecto a esta verdad de “La Palabra” mientras estemos en el cuerpo… Muchos seguiremos siendo ejercitados, pues cada paso que damos en el crecimiento de nuestra verdadera identidad (Cristo), nos llevara a experimentar que “En parte conocemos y solo en parte podremos hablar” (1Cor:13: 9).

Y es precisamente aquí, donde, por nuestra manera de pensar conforme hemos venido siendo formados, tomamos decisiones “por temor, por insensatez o por ignorancia” y terminamos desechando la Palabra de Dios, dando más crédito a nuestros pensamientos, a la religión, a las costumbres, tradiciones, a la letra muerta, a la familia, a los padres, al pastor, a la congregación, etc. (Mat: 10: 37-39)… Olvidando que es el Espíritu quien ¡Nos guía a toda verdad! (Juan: 16:13).

Introducción:

Jesus dijo: (Mat: 7:24-27) Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca... Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena...

Analicemos estas dos clases de personas, una Sabia y otra Insensata, una que edifico sobre la roca y la otra sobre la arena, una permaneció firme y la otra cayó; y como consecuencia de haber desechado la palabra… “Fue grande su ruina.”

Y todo esto frente las mismas situaciones de vida que se presentaron. ¿Por qué? ¿No oyeron los dos, las mismas palabras? ¿No tenían los dos, el mismo maestro? La verdadera razón es la siguiente:

Porque una tomo la palabra, la creyó y la puso por obra, pero el otro, desecho la dirección y tuvo en poco la palabra de Dios. Recordemos: el Sabio, oye, cree y hace; pero el insensato es el que oye, cree y no hace… ¡La voz del que DICE, no es importante para el!

Por eso valoremos la voz del que nos DICE todas las cosas… (Stgo: 1:22-25) Pero “sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.”

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.

¿Quién fue el que DIJO estas palabras?... ¿Santiago o Dios? o se nos tiene que hablar como escribiera el Apóstol Pedro en una ocasión a la congregación, diciendo… “El que no tiene estas cosas tiene la vista muy corta; es ciego… (2Ped: 1:9).

Jesus dijo: “Pero bienaventurados vuestros ojos, porque ven; y vuestros oídos, porque oyen.” Porque de cierto os digo, que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron (Mat: 13:16-17). Recordemos… ¡Dios NO habla, Dios DICE!

En este Ministerio de Gracia y Revelacion el Señor nos ha ido llevando en un conocimiento especial “de gloria en gloria”; tanto de él, como de Su palabra.

Todos empezamos recibiendo las enseñanzas de la Ley de Moisés, después fue el mismo quien nos quitó la Ley y nos permitió crecer en el conocimiento de la Gracia dada al apóstol Pablo; pero ahora está quitándonos el conocimiento de la Gracia para que disfrutemos de nuestra Verdadera Identidad “(Cristo) Su vida (Col: 3:4)” Entendiendo que no vivimos nosotros sino el, a traves nuestro “En todos” (Col: 3: 11b).

Esto ha dejado a muchos en el camino… Por ¿Temor, miedo, ignorancia, insensatez, libertinaje, pereza? No se… ¡Dios lo sabe! En cierta ocasión fue el mismo Apóstol Pablo quien confrontó a los hermanos en Galacia cuando vivió una experiencia similar, diciendo:

¿Busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo (Gál: 1:10) y les aclaró también como muchos se estaban dejando robar el crecimiento espiritual que habían alcanzado volviendo atrás; les dijo: ¿Me he hecho, pues, vuestro enemigo, por deciros la verdad? Tienen celo por vosotros, pero no para bien, sino que quieren apartaros de nosotros para que vosotros tengáis celo por ellos (Gál: 4:16-17).

Meditemos por el Espíritu:

En estas palabras dadas por Dios a Salomón… (Prov: 9:7-9) El que corrige al escarnecedor, se acarrea afrenta; el que reprende al impío, se atrae mancha. No reprendas al escarnecedor, para que no te aborrezca; Corrige al sabio, y te amará. Da al sabio, y será más sabio; enseña al justo, y aumentará su saber.

¿Cómo estamos actuando nosotros respecto a la palabra de Dios que guía siempre nuestra vida?...

Oracion: Declaro en Dios que somos Sabios y Entendidos… Y que Su palabra cumple en nosotros el propósito establecido desde antes, llevándonos a discernir por el Espíritu cada una de las situaciones que se presentaran en este caminar de vida, creciendo en consciencia limpia para nuestra bendicion y Su gloria.

Teniendo en cuenta estas palabra dichas por el Señor Jesus, “Pero bienaventurados vuestros ojos, porque ven; y vuestros oídos, porque oyen.” Porque de cierto os digo, que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron (Mat: 13:16-17), algunos de los temas anteriores que hemos tratado, como son: “Lo que no aplicamos, Renunciando a lo oculto y vergonzoso, Prosigo a la Meta, El Evangelio Encubierto, El Servicio para los Santos”… Y la formación que hemos venido recibiendo, preguntémonos… ¿Estamos desechando la palabra de Dios?

Por el Espíritu entendemos que el Señor es quien apresura Su palabra para ponerla por obra (Jer: 1:12), y que él, cumple con su mano lo que ha dicho con su boca… (2Cron: 6:15).

Entendamos… La Palabra de Dios: Como bien sabemos… Es la misma “Palabra de Dios”… No es la palabra de cualquiera, como si estuviéramos refiriéndonos a alguna persona humanamente hablando, sino la Palabra de Dios...Desechar Su palabra es como si lo estuviéramos desechando a él, el Creador de todas las cosas “Las que vemos y las que no vemos”, las palabras del Padre de los espíritus, del Dios todo poderoso, el cual se está manifestando HOY en todo y en todos (Col: 3: 11).

Ejemplo: Cuando necesitamos medir algún un objeto en especial, usamos “Un Metro” El cual  es el patrón establecido para determinar las medidas. Pero cuando se trata de los asuntos de Dios, el patrón o instrumento que usa Dios para medir la conducta humana es: “Su Palabra”… (No la Biblia); ahora, cuanto más; cuando decimos y sabemos que hemos sido alumbrados por Su espíritu…

Su palabra:

1. Fue Inspirada: o sea (Comunicada por Dios) ¡A unos, no a todos!

La versión (Reina Valera de 1960) dice: “Toda la escritura es inspirada por Dios, y es útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra” (2Tim: 3:14-17).

Las (Sagradas escrituras versión antigua 1569) dice: Toda Escritura inspirada divinamente es útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instituir en justicia… (2Tim: 3:16).

Ahora veamos el mismo pasaje de la biblia tomado desde la biblia versión Reina Valera Strong de 1960 que viene con notas en Griégo y en Hebréo… La cual dice:

(2Tim:3:16) Toda G3956 JNSF  Escritura G1124 NNSF inspirada G2315 JNSF por Dios, es G2532 C útil G5624 JNSM para G4314 P enseñar, G1319 NASF para G4314 P redargüir, G1650 NASM para G4314 P corregir, G1882 NASF para G4314 P instruir G3809 NASF en G1722 P justicia, G3588  G1343 DASF NDSF

a)    Significado de las referencias:

G3956: πᾶς = pás = Incluído todas las formas de declinación; aparentemente palabra primaria; todo, cualquiera, cada uno, el todo:-siglo, todo, clase, cosa, manera.

G1124: Γραφή = grafé = de G1125; documento, i.e. santo Escrito (o su contenido o declaración en él):-escritura.

G2315: Θεόπνευστος = dseópneustos = de G2316 y de un derivado presunto de G4154; divinamente soplado en:-inspirar.

G2532: Καί = kaí = Aparentemente partícula primario, teniendo fuerza copulativa y a veces también cumulativa; y, también, aún, así, entonces, también, etc.; a menudo usado en conexión (o composición) con otras partículas o palabras pequeñas:-así, cuando, de la misma manera, en verdad, pero, porque, si (cond.).

Ahora hagamos un paralelo de la primera parte de (2Tim:3:16) versión Reina Valera de 1960 y la Reina Valera de 1960 Strong en Griego.

Reina Valera de 1960 dice “Toda la Escritura es inspirada por Dios…”

Reina Valera de 1960 Strong (Griego) pás grafé dseópneustos kaí… (Español) Toda escritura inspirada por Dios es útil…

Lo que quiere decir que El artículo “La” le cambia totalmente el significado a lo que se dice respecto de la escritura, o sea que NO TODA la escritura es inspirada por Dios, ni toda la Biblia es la Palabra de Dios aunque SI contiene la Palabra de Dios.

Entendamos esto por el Espíritu… “La Biblia NO puede contener TODA la Palabra de Dios, porque nos diría que su palabra tiene un principio y un fin, eso es IMPOSIBLE y no estaría dando paso a la REVELACION de Dios la cual está por encima de la INSPIRACION.

 La Palabra de Dios fue inspirada por él y puesta por Su espíritu en el corazón de todos aquellos que la escribieron, para ser luego puesta en el canon Bíblico, pero NO porque fue escrita en la biblia se considera toda ella como la Palabra de Dios; pues ella tiene principio y tiene fin, y NUNCA podremos enmarcar a Dios y a Su palabra entre las “Dos pastas de un libro”, que no son más que tinta y papel, es “Litografía”

La palabra de Dios…

a. No proviene de los hombres, no es producto del ser humano Sino de Dios. Es Dios mismo quien nos llena de su palabra (Sal: 81:10)  ejemplo: (Jer: 1:9) “He aquí he puesto mis palabras en tu boca” Su palabra esta EN nosotros “Mente y Corazón” (Rom: 10: 8) la palabra de Dios es espíritu y es vida (Juan: 6:63) “NO es letra muerta” y “Nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo” (2 Pedro.1:20-21).

b. No es según hombre, Ej. No es Santo evangelio según… San “Mateo, Marcos, Lucas o Juan” (Gál: 1:11).  Pablo escribió: “Mas os hago saber, hermanos, que el evangelio, las buenas nuevas, la palabra de Dios anunciado por mí, no es según hombre…”

2. Fue Revelada: (Dada a conocer por Dios mismo)

Pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo. (Gál: 1:12) Pablo, siervo de Jesucristo, llamado a ser apóstol, apartado para el evangelio de Dios, (Rom: 1:1).

Fue por esta causa que el Apóstol Pablo escribió: “Por lo Cual también nosotros sin cesar damos gracias a Dios, de que cuando recibisteis la Palabra de Dios que oísteis de nosotros, la recibisteis no como palabra de hombre, sino según es en verdad, la Palabra de Dios, la cual actúa en vosotros los creyentes” (1Tes:2:13).

3. Es FIEL y actúa siempre en nosotros: ¡NO podemos negarlo!

(1Tim: 4:9) Palabra fiel es esta, y digna de ser recibida por todos…

A. Es útil para enseñar. (La Verdad) “Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres” (Juan: 8:32) La doctrina de Dios, el Evangelio. “Buena Nueva” ninguno la puede enseñar a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce al Señor; porque todos lo conocerán, desde el menor hasta el mayor de ellos (Heb 8:11) y solo él por su espíritu nos puede guiar (Juan: 16:13).

B. Es para redargüir. (Convencer, refutar, reprender, juzgar) (2Tim: 4:2-3) que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina.  Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina…

C. Es para corregir. "epanorthosis" (Enmendar, advertir, Restaurar) Restaurar a un estado recto o correcto. Enderezar lo que está equivocado o errado (Prov: 15:21, 16:9, 23:19). Cambiar al hombre, mejora la vida y el carácter.

D. Instruir en justicia. Nos señala el buen camino, nos muestra como es Dios… “Más el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley (Gál: 5:22-23) (1Cor: 13:4-8a).

4. ¿Cuál es el propósito de la palabra de Dios?

a. Su fin es que el hombre sea perfecto en toda su manera de vivir (Pensamientos, palabra, obra y actitud) (Col: 3:17)  “Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo para la gloria de Dios, y dando gracias…

b. y este enteramente preparado para toda buena obra. (Col: 1:10-12) “para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios; fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad; con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz”

5. Es la Espada del Espíritu Santo.

(Efe: 6: 17) “la espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios”

Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta (Heb 4:12-13).

6. ¿Cuál debe ser nuestra Guía o Patrón de vida?... “Su palabra, no la biblia”…

El Rey David escribió: Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino (Sal: 119:105) ¡No la desechemos!

Los sentimientos: “NO” deben ser nuestra autoridad. “Sea bendito tu manantial, y alégrate con la mujer de tu juventud, como cierva amada y graciosa gacela. Sus caricias te satisfagan en todo tiempo, y en su amor recréate siempre” (Prov: 5:1-23).

De nuestras opiniones “NO” debemos dejarnos llevar. (Prov: 3:5-8) Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas.

No seas sabio en tu propia opinión; Teme a Jehová, y apártate del mal; porque será medicina a tu cuerpo, y refrigerio para tus huesos. Ejemplo: (Juan.16:2) “viene la hora cuando cualquiera que los mate, pensara que rinde servicio a Dios”

Pablo dijo: y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder, para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios (1Co 2:4-5). 

Las tradiciones religiosas: “NO” deben ser nuestra autoridad.

Desde tiempos antiguos Jesus mismo exhortaba sobre esto diciéndoles: Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, como está escrito: Este pueblo de labios me honra, mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran, enseñando como doctrinas mandamientos de hombres.

Porque dejando el mandamiento de Dios, os aferráis a la tradición de los hombres: los lavamientos de los jarros y de los vasos de beber; y hacéis otras muchas cosas semejantes. Les decía también: Bien invalidáis el mandamiento de Dios para guardar vuestra tradición (Mar 7:6-9).

Y Pablo escribió: (Heb 6:1-3) “Por tanto, dejando ya” los rudimentos de la doctrina de Cristo, vamos adelante a la perfección; no echando otra vez el fundamento del arrepentimiento de obras muertas, de la fe en Dios, de la doctrina de bautismos, de la imposición de manos, de la resurrección de los muertos y del juicio eterno. Y esto haremos, si Dios en verdad lo permite.

La Mayoría o multitud: “NO” deben ser nuestra autoridad. No es como el dicho popular… ¿Para dónde va Vicente? “Para donde va la gente” ¡NO!

Pablo se apartó de ellos… Pero endureciéndose algunos y no creyendo, maldiciendo el Camino delante de la multitud, se apartó Pablo de ellos y separó a los discípulos, (Hech: 19:9). La multitud no siempre hace lo bueno. En el caso de Jesús… Toda la multitud dio voces a una, diciendo: ¡Fuera con éste, y suéltanos a Barrabás! (Lucas.23:18) y en el caso de Esteban fue la multitud quien lo apedreó hasta matarlo. (Hechos.7:57-58)

La Religión de los Padres: “NO”— no debe ser nuestra autoridad.

Pablo seguía y era celoso de las tradiciones religiosas de sus padres... Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres. (Galatas.1:13-14).

7. Conclusión:

La Palabra de Dios: “SI” es nuestra autoridad y guía...

“Mirad que no desechéis al que habla. Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que los amonestaba en la tierra, mucho menos nosotros, si desecháremos al que amonesta desde los cielos” (Heb: 12:25). No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará (Gál: 6:7).

Por eso Pablo le escribió a Timoteo… “Te encarezco delante de Dios” que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas. Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio (2Tim: 4:1- 5).

Meditemos:

A nosotros a la verdad era necesario que se nos hablara primero la palabra de Dios, el verdadero evangelio el cual es para nuestros días “Dios és, el todo y en todos” (Col: 3: 11b) para poder desarrollar en Dios este Ministerio de Gracia y Revelacion. ¡NO la desechemos! pues somos dignos de Reinar en vida por la palabra… Nosotros, los que hemos sido puestos en este tiempo, para manifestarlo a él, en todas las cosa que pensemos, digamos y hagamos.

Jesus dijo: (Juan.12:48). “El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado ella le juzgara en el día postrero”

Recordemos que nosotros somos su imagen, reflejo, gloria, olor fragante, bendicion y vida de Dios mismo en el mundo entero (1Juan: 4:17b).